yachay Año 41, nº 79, 2024, p. 129-146

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YACHAY ADHIERE A UNA LICENCIA CREATIVE COMMONS
ATTRIBUTION-NONCOMMERCIAL 4.0

INTERNATIONAL – (CC BY-NC 4.0) BY NC
cc

Miscelánea
DOI: https://doi.org/10.35319/yachay.202479118

Desde sus entrañas amazónicas
From their Amazonian core

Alejandra Fernandez Arze1

Valeria Michea Rivera2

Resumen
El presente ensayo interpreta la relación entre vida y muerte en el libro Tierra
fresca de su tumba de Giovanna Rivero desde tres vínculos principales:
muerte y sueño, para mostrar la continuidad entre la vida terrenal y el mundo
espiritual; la relación entre animales y humanos, para desdibujar las fronteras y
comprender el parentesco entre ambos; y lo chamánico, con el fin de valorar los
elementos de la cultura amazónica que desafían las concepciones occidentales
respecto de la mentada relación.
Palabras clave
Vida – muerte – cosmovisión amazónica

1 Universidad Católica Boliviana, Cochabamba, Bolivia.
2 Universidad Católica Boliviana, Cochabamba, Bolivia.

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Abstract
This essay interprets the relationship between life and death in the book Fresh
earth of their tomb by Giovanna Rivero from three main bonds: death and
sleep, in order to show the continuity between earthly life and the spiritual
world; the relationship between animals and humans, in order to fade borders
and understand the kinship between the two; and the shamanic, in order to value
the elements of the Amazonian culture that challenge Western conceptions
regarding the aforementioned relationship.
Key words
Life – death – Amazonian cosmovision

En un artículo publicado por Yachay el 2002 Vilma Tapia, abriéndose
en nostalgia y pensando sobre la tierra más ajena, afirmaba que la
muerte es la primera noche tranquila3. Aquella vez que nos acercamos
a dicho escrito quedamos atrapadas por la magia de sus palabras, como
si de un cántico sabio pero distante (ajeno) se tratara. Años después,
aún seducidas por dicho texto, nos topamos con los cuentos de Tierra
fresca de su tumba de Giovanna Rivero4. En ellos la noche llega, como
mencionaba Vilma, pero jamás con tranquilidad, y la muerte persigue
cada historia, pero sin dejarlas descansar. Y es que Giovanna tuvo que
alejarse un poco de la visión occidentalizada de vida y muerte para mirar
a los costados dominados por sus entrañas cruceñas, amazónicas, y
guiarse en el camino trazado por éstas. Nosotras, sus lectoras, absorbidas
por aquella tierra ajena (amazónica) donde el alma no escapa a la muerte,
nos vimos con el deseo de acercarnos a este lugar prometido y sin
embargo desconocido para entenderlo desde la finitud del hombre, su
relación con los animales y lo chamánico. De este modo hemos querido
3 Vilma Tapia, “La muerte es la primera noche tranquila”, Yachay 36 (2002): 125-137.
4 Giovanna Rivero, Tierra Fresca de su tumba (La Paz: El Cuervo, 2020).

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acercarnos a los textos de Giovanna Rivero en Tierra fresca de su tumba
con el objetivo de leerlos desde las luces de la cosmovisión amazónica,
que amplía nuestro modo de comprender la literatura boliviana.

I
Bajo la sombra de la noche, donde el canto de los pájaros descansa, y

el lenguaje es, de la misma manera, silenciado, el hombre y los animales
se vuelven en sueño y en vigilia más vulnerables5. Mirando hacia el
este6 los seres aguardan la salida del sol con la promesa de un nuevo
día fértil. La noche es el momento de reposo del cuerpo, pero también,
el lugar en el que los espíritus tienen más acción. Durante el sueño el
alma deja su disfraz, al que le debe su presencia; y con la libertad de
recorrer el mundo de noche, su cuerpo peligra de caer en olvido. En
el viaje nocturno de las almas, no hay quien frene el vuelo en libertad;
en él reposa el riesgo del no retorno. La primera luz del día anuncia el
tiempo de regreso de las almas a su hogar; quien no llegue antes del
despertar puede perder su cuerpo. Existe un segundo riesgo para estos
cuerpos en descuido: los espíritus malos pueden aprovechar el cuerpo
vacío y adueñarse de él. La muerte no es sin más el fin de la vida, no es
el destino o meta última de la naturaleza; la muerte es el agravio contra
el alma, la consecuencia de un mal espiritual7.
5 Para las distintas naciones amazónicas respecto al hombre, durante el sueño “he is more

vulnerable to supernatural attacks” [el hombre es más vulnerable a los ataques sobrenaturales].
Luis Eduardo Luna, Vegetalism: Shamanism among the mestizo population of the Peruvian
Amazon
(Stockholm: Department of Comparative Religion, 1986), 91.

6 “House entrances, mats for sleeping, and shamanistic ceremonies should also be oriented
toward the east. To ‘lie down in the wrong direction’ (kitatagantsi parikoti), whether in sleep,
trance, or death, attracts evil forces and causes nightmares or demonic apparitions” [Las
entradas a las casas, las esteras para dormir y las ceremonias chamánicas también deben
orientarse hacia el este. ‘Acostarse en la dirección equivocada’ (kitatagantsi parikoti), ya
sea durante el sueño, el trance o la muerte, atrae fuerzas del mal y provoca pesadillas o
apariciones demoníacas]. Glenn H. Shepard Jr., “Three days for weeping: dreams, emotions,
and death in the Peruvian Amazon”, Medical Anthropology Quarterly 16, no. 2 (2002): 209.

7 Para las naciones amazónicas: “death is not an immutable fact of nature but, rather, an artifact
of sexual aggression perpetrated by humans, demons, and other supernatural beings” [La

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El mundo es el espacio donde coexisten los vivos, muertos, cuerpos
y espíritus. Lo bueno y lo maligno no se contraponen, sino que habitan
en un mismo lugar. De una forma parecida, los hombres y animales
son uno en alma8 diferenciados sólo por la ilusión de un cuerpo; con
ellos comparten conciencia y viven bajo las mismas leyes9. Cuando la
vida del hombre termina su alma adquiere un cuerpo animal; aun así,
puede seguir comunicándose con aquellos que recuerda. El lenguaje es
universal y se utiliza para relacionarse con los vivos, muertos, humanos
y animales; aunque la respuesta no sea instantánea el destinatario trata
de contestar a través de cánticos en medio de la vigilia o del sueño. Por
ello y adelantándose a la muerte, el chamán utiliza la noche para vestirse
de bestia y comunicarse con ellas.

Así, en medio del cántico de la selva amazónica entre los
tambores, vientos y cuerdas, la voz de los hombres se levanta y junto
al movimiento rítmico10 de sus cuerpos cubiertos de colores, plumas y
máscaras11 empieza el tiempo de los deberes chamánicos. Luego, bajo

muerte no es un hecho inmutable de la naturaleza sino más bien un artefacto de agresión
sexual perpetrada por humanos, demonios y otros seres sobrenaturales]. Glenn H. Shepard
Jr., “Three days for weeping…”, 206. Los agravios espirituales son los causantes de
enfermedades que pronto derivan en la muerte del individuo.

8 “Lo mismo que en la Amazonia, la mayor parte de los animales se conciben como personas
dotadas de un alma, lo que les confiere unos atributos absolutamente idénticos a los del
ser humano (por ejemplo, la conciencia reflexiva, la intencionalidad, la vida afectiva o el
respeto hacia unos preceptos éticos)”. Philippe Descola, “Las cosmologías de los indios de la
Amazonia”, Zainak, 17 (1998): 224.

9 “The differentiation between ‘culture’ and ‘nature’,which Levi-Strauss showed to be the central
theme of Amerindian mythology, is not a process of differentiating the human from the animal”
[La diferenciación entre ‘cultura’ y ‘naturaleza’, que Lévi-Strauss demostró es el tema central
de la mitología amerindia, no es un proceso de diferenciación del ser humano del animal].
Eduardo Viveiros De Castro, “Cosmological deixis and Amerindian perspectivism”, The
Journal of the Royal Anthropological Institute
4, no. 3 (1998): 471.

10 “Los espíritus vienen al llamado de los cantos sagrados de los maestros poderosos. Al
parecer, la alegría del canto llama la atención de los espíritus y por eso se dice que, algunas
veces, los espíritus llegan a las sesiones de ayawaska bailando”. Pedro Favaron, “Llamando
a los espíritus: Cantos sagrados de la Amazonía”, Tinkuy. Boletín de investigación y debate,
16, (2011): 155.

11 “Man ritually clothed as an animal is the counterpart of the animal supernaturally naked. The

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el abrigo de la ayahuasca la fiesta se convierte en el lugar del sueño y
la alucinación12, aquella planta, aquella leche materna, tiene el poder de
enseñar al espíritu, de llevarlo por el camino de lo sobrenatural. También
el chamán, al comunicarse con los espíritus, por medio de las plantas,
calma las enfermedades que aquejan a su gente: él cura y al mismo
tiempo hiere, pues la muerte y las enfermedades, al no ser naturales y
tener consecuencias espirituales, pueden ser devueltas a quién las causó.
Las plantas son el camino a la sabiduría, pero el canto pone las cosas
en movimiento13. Al final de la noche los ícaros se elevan en el cielo
para iniciar una conversación con lo espiritual y el hombre se queda a la
espera de una respuesta en forma de sueño.

II
Es posible acercarse a los textos de Giovanna Rivero con la

ingenuidad de quien lee con el simple afán de acortar la tarde de domingo,
sin más deseo que abandonarse a la espera de la noche que despide al
tedio y da la bienvenida a una nueva laboriosa semana. Algo así como
un paréntesis entre el mundanal ritmo de la existencia. Pero también
podemos acercarnos a Giovanna para buscar luces sobre lo qué es la
literatura para ella y, por lo mismo, lo que es la vida, el dolor, el miedo,

former, transformed into an animal, reveals to himself the ‘natural’ distinctiveness of his body;
the latter, free of its exterior form and revealing itself as human, shows the ‘supernatural’
similarity of spirit” [El hombre vestido ritualmente como un animal es la contraparte del animal
sobrenaturalmente desnudo. El primero, transformado en animal, se revela a sí mismo la
singularidad ‘natural’ de su cuerpo; este último, libre de su forma exterior y revelándose como
humano, muestra la semejanza de espíritu ‘sobrenatural’]. Luna, Vegetalism…, 480.

12 Aclarar que estas alucinaciones no son solo festivas, sino que sirven para el aprendizaje “The
association between dreams and hallucinations is a common theme in shamanic literature. As
far as I understand, all psychoactive plants are considered potential teachers” [La asociación
entre sueños y alucinaciones es un tema común en la literatura chamánica. Según se
tiene entendido, todas las plantas psicoactivas se consideran maestras potenciales]. Luna,
Vegetalism…, 63.

13 Entre las naciones amazónicas existen pueblos como los “Sharanahua, who use ayahuasca
only to diagnose the illness, but who cure it with magic chants [Sharanahua, quienes utilizan
la ayahuasca sólo para diagnosticar la enfermedad, pero la curan con cantos mágicos]”. Luna,
Vegetalism…, 108.

la injusticia. Una escritora compleja deja huellas, no escribe panfletos
ni discursos, pone a disposición de sus lectores personajes tan vivos, tan
autónomos, tan libres que pueden hablarnos sobre la vida sin entorpecer
nuestro deseo de que la ficción supere a la realidad.

El primer punto que analizamos en la lectura de Tierra fresca de su
tumba es la finitud. Giovanna Rivero nos recuerda que somos mortales y
no podemos olvidarnos de ello. Lo hace sutilmente, componiendo vidas
quebradizas, personajes con destinos trágicos sin posibilidad de huir;
con muertes jóvenes que nos enseñan sobre la injusticia de la plenitud
truncada; con personajes que no sólo son humanos, sino también
animales, astros o totalidades que nos cuentan lo imposible que es
conseguir nuestro deseo moderno de distinguirnos de la naturaleza y los
espíritus. Hay en los textos que componen este libro una preocupación
por no dividir la existencia en especies y por no olvidar que, pese al
cambio, abandono o muerte, la presencia existe; siempre se queda
viviendo entre nosotros un recuerdo que no nos permite escapar hacia
la indiferencia.

En todos los cuentos de este libro es posible encontrarse con la finitud
de la vida humana y general, que pena por los pasajes de estos textos
como si se debiese escapar de una condena irreparable. Por ejemplo,
en “Cuando llueve parece humano” nos encontramos con plantas que
luchan por mantenerse con vida y con una cuidadora que lucha aún más
por rescatarlas de las manos de la muerte14. También en ese cuento se
nos presenta la historia de una mujer que parece regresar de la muerte: si
no se trata de una resurrección, al menos podemos hablar de un alma que
puede volver a comunicarse con quienes en la tierra fueron su familia15.
14 “Sin embargo, con las plantas no había mucho que hacer. Había intentado climatizar el área

del jardín dejando toda la noche prendidas las farolas de la galería [...]. No le quedaba otra
opción que acariciar sus plantas con la voz y desearles que tuvieran la fortaleza de soportar
otra helada”. Rivero, Tierra…, 67-68.

15 De esta manera la protagonista de la historia se da cuenta de que está hablando con una

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Giovanna, con destreza, nos muestra personajes azotados por diferentes
males que deben enfrentarse a la muerte en distintas situaciones:
enfermedades, accidentes, muerte asistida, suicidio, asesinato, etc.
Es en “Socorro” que se muestra la muerte ocasionada por un suicidio
temprano, transformado en un tabú rondando en las consciencias de las
personas que rodeaban al ahorcadito16; el cuarto donde se cometió el
suicidio está ahí, está intacto, pero ahora transformado en una tumba17
que recuerda que hay secretos que rondan las casas como almas en pena.
La muerte entonces acompaña a los vivos, nada se detiene con la muerte
de un cuerpo, la vida se transforma en recuerdo que bien puede pesar o
acompañar.

La muerte también puede ser una elección, aunque es probable que
nadie la abrace sin una cuota de esperanza que le aferre a la vida. En
“Hermano ciervo” nos encontramos con una joven pareja que, intentando
salir de la pobreza, ven como buena salida entregar sus cuerpos, su
sangre a la ciencia para que se experimente un nuevo medicamento. La
pobreza empuja a las personas a tomar decisiones límites, incluso si éstas
son verdaderas sentencias de muerte. Este es el caso del protagonista
de este cuento, quien toma la opción de prestar su cuerpo a la ciencia.
Él está acompañado de su esposa quien no lo detiene, y más bien lo
alienta a continuar con el proceso, pese al deterioro de su salud, pese a
lo inminente de su muerte.

persona que no está en el mismo plano que ella: “La señora Keiko ya no tenía dudas. Supo
que así tenían que darse las cosas. Era lógico. [...] Quiso preguntarle a Emma si a pesar de
las heridas que la tierra le había curado todavía le dolía algo” Rivero, Tierra…, 96-97.

16 Forma en la que el personaje Socorro se refiere al personaje que se suicidó en el cuento. Cf.
Rivero, Tierra…, 106.

17 “El foco descolorido sumía el cuarto de planchar en lo que era: una tumba”, dice la personaje
en el cuento. Más adelante Socorro, la tía loca, agrega: “Me fui calladita al cuarto de planchar.
Todo en oscurana. [...] Prendí la luz del cuartito y primero vi sus pies [..] Luego vi su cara…
Esa mancha morada que le daba vuelta el pescuezo”. Rivero, Tierra…, 130-131.

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El segundo punto que analizamos en nuestra lectura de los cuentos de
Giovanna Rivero es la relación entre humanos y animales. Pareciera ser
que en muchos apartados de este libro se quiere mostrar al ser humano y
a los animales como seres de igual dignidad y, por lo mismo, de idéntica
importancia. En el cuento que abre este libro nos encontramos con la
historia de una violación que rompe la vida de Elise, la víctima, y su
familia. Obligados a abandonar su comunidad, la familia comienza una
nueva vida, pero ésta empieza cuando se acaba con el origen del dolor:
el violador. El padre de la víctima, su empleado llamado indio y su hija
se reúnen frente a una fosa recién cavada y citan al violador. Allí el
violador es empujado al fondo de la fosa que inmediatamente comienza
a ser rellenada con tierra fresca para así dar pie al nuevo comienzo de
esta vida quebrada. Aquello que reafirma la dignidad de los animales
junto a la de los seres humanos en este cuento, es el hecho de que cuando
entierran al violador, la hija recuerda a otras víctimas y dice que esa
venganza es por ella, por Leah y por Carolina18, una vaca que ella había
visto ser violada por dicho depredador19. No se excluye a la vaca, se la
incluye porque su vida importa tanto como la de las mujeres.

Los seres humanos no están por sobre los animales en los cuentos
de este libro, están ahí acompañando, pero también llevando a cabo su
propia existencia que no está supeditada a los quehaceres humanos. En
“Pez, tortuga, buitre” se relata la historia de dos hombres que naufragan
en medio de la ardua faena de cazar tiburones. En ese naufragio sólo
uno de ellos, Amador, logra sobrevivir, mientras que su compañero
Coronado, muere. Pese a esto, Coronado parece seguir conectado con la
vida y sigue conversando con su compañero Amador, relatándole incluso
18 El cuento cierra con: “Por ella, por Leah Welkel y por Carolina. También por Carolina”. Rivero,

Tierra..., 35.
19 La narradora lo relata de esta manera: “montándola como una vez ella misma lo había

sorprendido, qué horror, haciéndoselo a la pobre vaca de los Welkel, a la que ella llamaba
secretamente Carolina” Rivero, Tierra..., 31.

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cómo se siente morir20. En este cuento los hombres y los animales están
al mismo nivel dado que todos están luchando por sobrevivir con el
mismo instinto y con la misma capacidad de carroñear y asesinar para
alimentarse21. Se muestra en el cuento a los cuervos rondando al cuerpo
del fallecido, se les muestra robándole un ojo y se insinúa que Amador
se comió el cuerpo de su amigo. Es que los animales y los humanos se
encuentran luchando y resistiéndose a la muerte de la misma manera.

A diferencia de los cuentos anteriormente mencionados, en
“Hermano ciervo” el ser humano parece tornarse en una criatura que está
al nivel de los animales, pero sólo en tanto que ambos ponen su cuerpo
al servicio de la ciencia. Este es el caso de los animales de laboratorio,
que poco nos ocupamos de ello y poco nos conmueve en general la
triste verdad de que, para que hoy tengamos acceso a innumerables
alternativas en torno a la medicina, alguien ha tenido que poner el
cuerpo: ya sea un animal, en la primera etapa o un ser humano en la
segunda etapa de prueba del medicamento. En “Hermano ciervo” está
la historia de Joaquín, un hombre que se ha convertido en un animal de
laboratorio. Todos lo tratan como un sujeto de estudio pero ya nadie se
ocupa de su dignidad22; los médicos compran su silencio. y su esposa
lo cuida, pero no se opone a la experimentación23. Por otro lado, para
20 “Es lindo estar muerto, le preguntó [Amador] como al tercer día de su muerte, que quizás sería

apenas el día 98 del viaje”. Rivero, Tierra..., 44. En otro pasaje se lee: “¿Es linda la muerte?,
volvía a preguntarle. Y Coronado le decía que sí, que la muerte era lo mejor”. Rivero, Tierra...,
47.

21 “Una tarde, poco después, Amador se dio cuenta de que a Coronado le faltaba un ojo. Los
culpables estaban allí, muy orondos, con sus pechos sobresalientes, las patas aferradas
al travesaño de donde colgaban las redes. Seguramente todavía masticaban el ojo tibio,
húmedo, blando como un huevo. Tanta era el hambre”. Rivero, Tierra..., 62.

22 Afirmamos esto basándonos en el hecho de que el deterioro del cuerpo de Joaquín como
sujeto de estudio, en vez de generar empatía, genera aversión entre sus pares. “Vienen dos
médicos que Joaquín saluda como si fueran sus primos o viejos compañeros del doctorado.
Sin embargo, ellos no se quitan ni los guantes ni el barbijo cuando le dan la mano a mi
marido”. Rivero, Tierra..., 206.

23 “Los médicos me miran probablemente esperando que yo haga entrar en razón a Joaquín.
[...] Páguenle el doble o nos vamos, digo. Podría añadir: Y nos llevamos el cuerpo de Joaquín

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calmar su dolor, la esposa de Joaquín se va a refugiar en el cadáver de
una cierva asesinada hace unos días afuera de su casa24. Nuevamente
los animales y los humanos están al mismo nivel. La falta del cuerpo de
Joaquín se puede suplir con la presencia de la cierva, ahora cadáver, que
sirve también como refugio de un duelo que acaba de comenzar.

Un tercer concepto que hemos abordado en nuestra lectura está
vinculado a lo chamánico que se desprende de un acercamiento a las
culturas amazónicas, como veíamos en el apartado anterior. En el cuento
“Mansedumbre” se muestra una escena que podemos interpretar como
chamánica, pues junto a la figura de un personaje llamado indio y su
eterno bolo de coca, presenciamos un ritual que resulta primordial para
comprender la historia del cuento como su desenlace. El mentado ritual
tiene relación con el uso de un cadáver en una fosa para comenzar a
construir un edificio: se trata de ofrecer un sacrificio a la Madre Tierra
para que ésta sea igualmente bondadosa y dadivosa con los seres
humanos en el futuro. La muerte en este cuento tiene el doble significado
de venganza y plegaria25.

Podemos decir también que en todos sus cuentos es posible rastrear
un aspecto chamánico: en el regreso de los muertos a la vida, pero no
como una resurrección sino como un alma que puede retornar y estar
entre los vivos porque el alma sigue viva26; en la presencia de un ser

a un mejor postor. ¿Pero quién se permite un exabrupto más en una noche tan absurda?”.
Rivero, Tierra..., 209.

24 “Ahí está. Ahí está ella. No me ha dejado sola. Le apartó la nieve de las ancas y la cubro con
la gasa. Su cuerpo abierto ya no anida gusanos. Es casi una cueva en la que yo misma podría
caber”. Rivero, Tierra..., 211.

25 Elise, la protagonista del cuento toma tierra con sus propias manos para echarla al foso y
“mira esos puñados como si fuera la primera vez que entra en contacto con la consistencia
granulosa de su materia y los arroja sobre el promontorio como una ofrenda propia, un ramito
de flores sucias y preciosas”. Rivero, Tierra..., 35.

26 En “Pez, tortuga, buitre” y en “Cuando llueve parece humano”, hay personajes muertos que
interactúan y participan del mundo de los vivos.

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amado que, pese a haber muerto, regresa para cuidar y acompañar27;
en la creación de objetos que cargan significados profundos, mágicos
y poderosos, como amuletos28; en el reconocimiento de la necesidad de
darle movimiento a la tierra para que permanezca fértil29; como personas
que pueden ser la encarnación de otras30, como pueblos, ciudades y
montañas que tienen espíritu propio31; a través de sueños en los que
se presentan los muertos32; a través de enfermedades que se mantienen
a raya con el uso de la voz, los cantos y las plegarias33; a través de
sangre que se convierte en código, estadística y pasaje a mejor vida34; o
animales que se convierten en refugio de duelo35.

III
En este punto integrador de nuestro texto queremos acercarnos a

Tierra fresca de su tumba desde la cosmovisión amazónica mostrando
cómo ésta se expone en ambientes, situaciones y personajes de los
cuentos. Creemos que la filosofía amazónica no se presenta solamente
como una temática o excusa para escribir algo sorprendente, sino que
está entretejida en el texto gracias a la estrecha relación que Giovanna
27 En “Cuando llueve parece humano”, la hijastra de la protagonista regresa para acompañar a

su madrastra.
28 En “Cuando llueve parece humano”, la señora Keiko se mostraba desconcertada ante la

creación de dicho amuleto: “todavía la perturbaba la perfección de la víbora coral que esa
reclusa había creado. Era un cachorro de dragón a punto de despertar de su naturaleza
inanimada, parecía hecho con pinzas. Y había nacido de esas manos rudas y criminales”.
Rivero, Tierra..., 81.

29 En “Cuando llueve parece humano”, la señora Keiko decide trasladar porciones de tierra fértil
hasta la zona seca de su jardín para animar a las plantas tristes.

30 En “Socorro”, hay la historia de dos niños que parecen ser la encarnación de su tío muerto.
31 En “Piel de asno”, una de los personajes, y además narradora. Nadine dice estas palabras.
32 En “Piel de asno”, Nadine siempre sueña, especialmente con su madre muerta.
33 El canto Gospel, la plegaria, la relación con Dios salva a Nadine de su enfermedad.
34 En “Hermano ciervo”, tenemos la historia de un hombre cuya sangre es poderosa en el

sentido de que es lo deseado por la ciencia y lo que le permite salir de la pobreza.
35 Una cierva que es asesinada en el jardín de la casa de los protagonistas de “Hermano ciervo”

es vista como refugio ante el duelo de la pérdida.

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tiene con su tierra. Por consiguiente, a continuación interpretaremos los
cuentos de este libro desde las nociones de muerte-sueño y alma-cuerpo.

En “Pez, tortuga, buitre” se presenta el deceso de un cuerpo agotado
por el sol y el mar. Este personaje, como mencionamos anteriormente,
no termina de morir, permanece en acción y diálogo con Amador; una
parte del alma de Coronado se niega a partir y dejar su cuerpo. Para las
naciones amazónicas, el cuerpo posee dos almas, una espiritual y una
telúrica; después de la muerte el alma telúrica puede quedar rondando
en la tierra. La persona no desaparece con la muerte, sino que el “alma
deambula por la selva durante mucho tiempo, después se va a vivir a
un lugar imaginario donde dicen se encuentra la tierra sin mal”36. En
Giovanna, la tragedia y el dolor del personaje provoca que su muerte
no se concrete hasta que sea vertido al mar; su alma telúrica se rehúsa
a irse. Sucede igual en “Cuando llueve parece humano”: el alma de la
mujer que es sepultada en el jardín tampoco encuentra inmediatamente la
muerte, sino que espera a ser sanada por la tierra37 que cubre su cadáver.
Algunas naciones amazónicas consideran mejor enterrar a los difuntos
dentro de casa38. Giovanna expone un escenario similar en este cuento:
la madre prefiere enterrar a su hija adoptiva dentro de la casa, donde el
padre no la extrañe, pero nuevamente para los personajes de este libro el
descanso del alma no es promesa inmediata de la muerte.

Para las naciones amazónicas existen distintos niveles de realidad
a los que se pueden acceder por sueños o alucinaciones; ninguna de
ellas tiene menor verdad. En los rituales de ayahuasca, la mente queda
36 María Hilda Peredo de Gonzales, “El nacimiento y la muerte en las comunidades del oriente

boliviano”, (conferencia, Universidad Autónoma Gabriel René Moreno, noviembre 2007): 17.
37 “Hay mucha gente que cree que la tierra sana heridas”. Rivero, Tierra..., 95.
38 “Dead people are buried inside the house” [los muertos son enterrados dentro de la casa].

Hugh-Jones, The Palm and the Pleiades, Initiation and cosmology in Northwest Amazonia
(Cambridge: Cambridge University Press, 1979), 186.

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en un estado de conciencia alterado. Ella es considerada una “planta
maestra” porque al consumirla uno puede navegar por distintos niveles
de realidad39. Advertimos en la estructura neogótica de los cuentos de
Giovanna, la presencia abundante de elementos amazónicos: lo oscuro,
lo sobrenatural y el desacierto de algunos personajes pueden ser leídos
por una alteración de consciencia, ya sea por el extremo agotamiento
físico o la ingesta de “Plantas maestras”.

En la historia de “Socorro”, el personaje presentado como enajenado
de la realidad es el bastión principal del cuento que intensifica la tensión
argumental de éste. Socorro, en este contexto, simboliza el yagé. Al
final del relato, la voz narrativa, ya exhausta, se rinde ante la locura
de Socorro, y en vez de rechazarla, como había hecho durante toda la
historia, hunde su rostro en el camisón de “la loca” y describe: “saqué
la lengua, lamí la tela, quizás la chupé y dejé que esa leche antigua
de Socorro me aliviara un poco”40. ¿De qué leche antigua habla esta
voz narrativa? Para algunas naciones amazónicas el yagé se simboliza
como la leche materna41. Socorro y la voz narrativa se encuentran en la
lucha de dos realidades distintas. La primera personifica el ensueño o
la alucinación que oculta un secreto oscuro e indescifrable; la segunda
personifica el deseo de escapar hasta que prueba la leche de aquel pecho
y se inicia en un estado de narcosis. Del mismo modo en “Pez, tortuga
buitre”, el relato de Amador se da a través de la ensoñación y debido al
extremo cansancio y agotamiento del personaje. El secreto del cuento
39 “By ingesting plant-teachers [...] the vegetalist frees himself from his normal physical

boundaries and is able to move freely across levels of reality” [Al ingerir las plantas maestras,
el vegetalista se libera de sus límites físicos y puede moverse libremente a través de niveles
de realidad]. Luna, Vegetalism, …, 152

40 Rivero, Tierra…, 133.
41 “Yage is said to be [ancestral] milk and it is given to the initiates to make them live. The initiates

themselves are said to be soft and are explicitly compared to newborn babies” [del Yagé se
dice que es la leche ancestral que se da a los iniciados para que puedan vivir. Se dice de ellos
que son suaves y son comparados explícitamente con un recién nacido]”. Stephen Hugh-
Jones, The Palm…, 182

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permanece oculto gracias al estado alterado de consciencia de Amador.
El alma de Coronado, después de haber muerto, sigue manifestándose en
el cuento, ¿pero de qué manera? En este punto reconocemos nuevamente
una realidad sobrenatural expuesta en las alucinaciones de Amador.
¿Cómo podría ver Amador a Coronado, después de muerto, moverse y
contestarle si no fuera por una alteración de la consciencia?

Como mencionamos en el anterior párrafo, en todos los cuentos
de Tierra fresca de su tumba existe un secreto cifrado que actúa
constantemente en la historia. Piglia afirma que “el secreto no es un
problema de interpretación de un sentido sino la reconstrucción de lo que
no está”42. La ausencia o lo no narrado provoca una incertidumbre en el
lector que le hace preguntar qué es real y qué no lo es. Sin embargo, en el
libro de Giovanna lo real no se separa de la alucinación, la incertidumbre
se diluye en la naturaleza de sus cuentos. Y ya no queda preguntar si lo
que sucede es real o no, porque, es real en cuanto es alucinación.

En cuanto a las nociones de cuerpo-alma, podemos ver que una
de las autoridades primordiales en las culturas guaraníes de Bolivia es
la del ipaye o chamán43, quien en calidad de autoridad está encargado
de diversas tareas de resguardo del pueblo, especialmente la medicina.
No resulta curioso, entonces, que este servicio medicinal que presta el
chamán a su gente no pueda ser atribuido a sus cualidades personales o a
su propio esfuerzo cognitivo, académico o económico, como podríamos
entenderlo desde las sociedades más occidentalizadas. Muy por el
contrario, es un don que ha recibido, ya sea por los espíritus o como
aprendiz de un chamán. De este modo, es un elegido o un iniciado que
ha de servir a su pueblo y ha de mantener sus sentidos muy abiertos
42 Ricardo Piglia, Teoría de la prosa (Buenos Aires: Eterna Cadencia, 2019), 17
43 Un ejemplo de esto es el pueblo Chiriguano que “cuenta con otra autoridad igualmente

decisiva y de importancia para el grupo en cuestión. Es el chamán, ipaye”. Juergen G. Riester,
El gran fumar, chamanismo guaraní (s/l: s/e, 1993), 4.

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para comunicarse tanto con su gente como con seres de la naturaleza
y los espíritus. No hay una separación entre todos los habitantes de la
tierra, pues hay una reciprocidad más allá de las relaciones humanas:
los animales y los espíritus participan del bienestar de los humanos y
viceversa.

Por otra parte, cabe mencionar que en estos cuentos se refleja que
en el cuerpo animal y en el cuerpo humano no hay distinción del dolor.
Eso pareciera decirnos Giovanna Rivero en sus relatos: los seres humanos
y los animales no están diferenciados dado que comparten el alma, por
lo mismo están constituidos de la misma materialidad y espiritualidad.
Así, estos textos muestran que el dolor es dolor y la muerte es muerte,
sin importar quién los padezca. Al cerrar el cuento “Pez, tortuga, buitre”,
Amador, el náufrago que sobrevivió, dice. “soy pez, soy tortuga, soy
agua, soy red, soy buitre”44, dejando en claro que está al mismo nivel
ontológicamente que los demás animales, seres y elementos. No se trata
de apartarse y sentirse superior a los demás. Amador sabe que sobrevivió
al naufragio comportándose como se habría comportado cualquier
otra criatura de la naturaleza; no había espacio para formalidades ni
objeciones. Estaba arrojado en la naturaleza y tenía que estar a la altura
de la situación. En este sentido, cabe preguntarse si el hecho de que
Amador se confiese buitre al cerrar el cuento significa que confiese a
la vez que comió el cuerpo de su amigo para sobrevivir. Esto es muy
complejo de resolver, porque al tener un final abierto, el cuento deja
la posibilidad del canibalismo, sin negar o afirmarla. De todos modos,
desde una perspectiva de la cosmovisión amazónica, esto no parece ser
tan condenable, pues la vida es lo más importante, aún si esto implica
comer carne humana, como lo harían los buitres. Para las culturas más
occidentales esto es una aberración porque los humanos y los animales
son completamente diferentes. Así, para los occidentales hay un riesgo
44 Rivero, Tierra…, 64.

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de solipsismo porque se diferencian profundamente de la naturaleza y
de los animales, mientras que en los amazónicos habría siempre latente
una posibilidad de antropofagia, ante la ausencia de esta separación45.

Si bien es cierto que “[t]oda aproximación a una obra va trazando
un mapa de conjeturas que no llegan a abarcar la multiplicidad de
significaciones que hacen la obra”46, estas viven en el texto, y los lectores
tenemos la licencia de navegar los textos buscando significados que nos
enseñen más sobre la literatura y la vida: ¿qué es una sin la otra?

45 “The phantom of cannibalism is the Amerindian equivalent to the problem of solipsism: if the
latter derives from the uncertainty as to whether the natural similarity of bodies guarantees a
real community of spirit, then the former suspects that the similarity of souls might prevail over
the real differences of body and that all animals that are eaten might, despite the shamanistic
effort to de-subjectivize them, remain human. This, of course, does not prevent us having
amongst ourselves more or less radical solipsists, such as the relativist, or that various
Amerindian societies be purposefully and more or less literally cannibalistic” [El fantasma del
canibalismo es el equivalente amerindio al problema del solipsismo: si este último deriva de
la incertidumbre sobre si la similitud natural de los cuerpos garantiza una comunidad real de
espíritu, entonces el primero sospecha que la similitud de las almas podría prevalecer sobre
la verdaderas diferencias entre de los cuerpos y que todos los animales que son consumidos
podrían seguir siendo humanos, pese a los esfuerzos chamánicos de desubjetivarlos. Por
supuesto, esto no impide que tengamos entre nosotros solipsistas más o menos radicales,
como los relativistas, o que varias sociedades amerindias sean decididamente y más o menos
canibalistas de manera literal]. Viveiros De Castro, Cosmological Deixis…, 469-488.

46 Vilma Tapia, “La muerte…”, 127.

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Alejandra Fernandez Arze es licenciada en Filosofía y Letras de la
Universidad Católica Boliviana San Pablo (UCB), con especial interés
en el pensamiento de Edith Stein y Hegel. Diploma en Escritura
Creativa de la Universidad Privada de Santa Cruz. Maestría en Estudios
Avanzados en Literatura Española e Hispanoamericana, de la Universitat
de Barcelona. Email: artbyale.af@gmail.com; ORCID: https://orcid.
org/0009-0006-6830-1987.
Valeria Michea Rivera es licenciada en Filosofía y Letras de la Universidad
Católica Boliviana San Pablo. Licenciada en Traducción inglés-español
en la Universidad Tecnológica de Chile INACAP. Enseña inglés y hace
traducciones. Diploma en Escritura Creativa de la Universidad Privada
de Santa Cruz. Docente de la Universidad Católica Boliviana San Pablo
(UCB). Maestranda en Educación Superior en la UCB. Email: vpmr24@
yahoo.com; ORCID: https://orcid.org/0009-0000-0578-1836.