yachay Año 41, nº 79, 2024, p. 95-127
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YACHAY ADHIERE A UNA LICENCIA CREATIVE COMMONS
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INTERNATIONAL – (CC BY-NC 4.0) BY NC
cc
DOI: https://doi.org/10.35319/yachay.202479117
A nueve años de la Encíclica Laudato si'. El
agravamiento de la problemática socioambiental y la
urgencia de cuidar la Madre Tierra1
Nine years after the Encyclical Laudato si'. The worsening of
socio-environmental problems and the urgency of caring for
Mother Earth
José Luis Saavedra2
Resumen
El propósito esencial del presente artículo es comprender las significaciones
primordiales de la encíclica del Papa Francisco, Laudato si'. Desde y a partir
de este horizonte ético, político y evangélico, procuramos interpretarla y
representarla a la luz de las graves problemáticas socioambientales que hoy se
están produciendo y agravando en el conjunto del planeta y, en consecuencia,
plantear alternativas emergentes de la propia Encíclica y también de las
ciencias, filosofías u ontologías y cosmologías contemporáneas concentradas
en la defensa del agua, el territorio y la biodiversidad de la Madre Tierra.
Nos interesa vislumbrar las propias posibilidades del restablecimiento y
regeneración de la vida en el contexto de una apremiante e inexcusable crisis
climática.
1 Para mis nietas, Valentina y Milen, maravillosas expresiones del florecimiento de la vida
(Valentina es en verdad prodigiosa porque su cumpleaños es precisamente el 22 de abril, Día
Internacional de la Madre Tierra) y, aun en su tierna edad, ambas son fervientes cuidadoras
del agua y la rica biodiversidad de la Madre Tierra.
2 Universidad Aymara “Tupak Katari”, La Paz, Bolivia.
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Palabras clave
Encíclica papal – cuidado de la Casa Común – alternativas socioambientales
Abstract
The essential purpose of this article is to understand the primary meanings of
the encyclical of Pope Francis, Laudato si’. From and to Starting from this
ethical, political and evangelical horizon, we try to interpret and represent
it in the light of the serious socio-environmental problems, which today are
occurring and aggravating throughout the planet and, consequently, propose
emerging alternatives from the Encyclical itself and also from contemporary
sciences, philosophies or ontologies and cosmologies focused on the defense
of water, territory and biodiversity of Mother Earth. We are therefore interested
in guessing the very possibilities of restoration and regeneration of life in the
context of a pressing and inexcusable climate crisis.
Key words
Papal encyclical – care of the Common Home – socio-environmental
alternatives
“Laudato si’, mi’ Signore” – “Alabado seas, mi Señor”, cantaba San Francisco de
Asís. En ese hermoso cántico nos recordaba que nuestra Casa Común es también
como una hermana, con la cual compartimos la existencia, y como una madre
bella que nos acoge entre sus brazos: “Alabado seas, mi Señor, por la hermana
nuestra Madre Tierra, la cual nos sustenta, y gobierna y produce diversos frutos con
coloridas flores y hierba” (LS 1).
Introducción
El propósito primordial del presente artículo es mostrar que el
actual contexto global, caracterizado por la grave crisis climática y
el consecuente efecto invernadero, muy bien descriptos por la Carta
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Encíclica Laudato Si’3 (Alabado seas) del Papa Francisco, empeora
–de una manera cada vez más dramática– en las actuales circunstancias
socioambientales del planeta en su conjunto, históricamente afectado
por la depredación minera, industrial e hidrocarburífera y ahora también
por la devastación agro-extractivista.
En una primera parte, caracterizaremos la actual situación
socioambiental, a nivel global y regional, como la de un inminente riesgo
de colapso ecológico4. Un reporte internacional alerta que la Tierra
podría estar un 18% más caliente que lo que se pensaba por el cambio
climático5. Y, ahora mismo, estamos teniendo las temperaturas más altas
en todo el planeta; los incendios y las inundaciones catastróficas se están
multiplicando en gran parte del mundo. Peor aún, estamos asistiendo a la
masiva destrucción de los hábitats naturales y los propios ecosistemas,
tanto que incluso hay quienes hablan de que estamos transitando hacia
la Sexta Extinción Masiva6.
En la segunda parte, proyectaremos respuestas efectivas a la actual
situación, no sólo de cambio climático sino también de devastación y
3 Francisco. “Carta encíclica Laudato si’ sobre el cuidado de la casa común” (Lima: Paulinas,
2015).
4 “La mayor parte de «límites para una vida humana segura» en el planeta han sido sobrepasados”,
La Vanguardia (31.05.2023), https://www.lavanguardia.com/natural/20230531/9009812/
humanidad-transgrede-limites-garantizan-planeta-seguro.html.
5 A principios del mes de agosto 2023, el Servicio de Cambio Climático Copérnico (C3S) de
la UE confirmó que julio había sido el mes más caluroso jamás registrado en la Tierra. Los
científicos temen que esto contribuya a que el planeta supere el límite de calentamiento
de 1,5º C y provoque fenómenos meteorológicos extremos como sequías, tormentas e
inundaciones. Jeremy Wilks, “Julio está siendo el mes más caluroso de la historia con más de
52 grados en algunas zonas”, Euronews (27.07.2023), https://es.euronews.com/2023/07/27/
julio-esta-siendo-el-mes-mas-caluroso-de-la-historia-con-mas-de-52-grados-en-algunas-
zonas; Amaranta Zermeno Jimenez, “Las temperaturas de septiembre baten récords y hacen
saltar las alarmas”, Euronews (05.10.2023), https://es.euronews.com/green/2023/10/05/las-
temperaturas-de-septiembre-baten-records-y-hacen-saltar-las-alarmas.
6 Cf. Erika Montejo, “La sexta extinción masiva está destruyendo ramas enteras del árbol de
la vida”, National Geographic (19.09.2023), https://www.ngenespanol.com/animales/la-sexta-
extincion-masiva-esta-destruyendo-ramas-del-arbol-de-la-vida/.
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más aún de aniquilación de la vida. La ruina de la naturaleza ya afecta a
más del 40% de la humanidad7. “La Tierra está alcanzando rápidamente
«extremos irreversibles» y […] nos enfrentamos a una triple amenaza:
la pérdida de la biodiversidad, la alteración climática y el aumento de
la contaminación”8. Estas inminencias pueden llegar a dejarnos sin los
alimentos, sin el agua y sin los recursos que necesitamos para sobrevivir.
Nos concentraremos en la articulación e irradiación de horizontes
radicalmente bio-céntricos, y así posibilitar (al menos como condiciones
de posibilidad) que la vida (no la economía) vuelva a ser el centro de
todo, y que aquí y ahora pueda volver a florecer la plenitud del Reino.
Cuando ya teníamos prácticamente terminado el presente artículo,
nos enteramos, con profunda alegría, que el Papa Francisco estaba
escribiendo un nuevo documento sobre el medio ambiente. En una
maravillosa consonancia con nuestras intencionalidades más esenciales,
el Papa Francisco declaró el 18 de septiembre de 2023 que estaba
escribiendo una continuación de su histórico documento de 2015 sobre la
protección del medio ambiente y los peligros del cambio climático “para
ponerlo al día”. Así, el 4 de octubre, Fiesta de San Francisco de Asís, se
publicaba la Exhortación apostólica Laudate Deum del Papa Francisco,
dirigida a todas las personas de buena voluntad e, inexcusablemente (no
podía ser de otra manera), sobre la grave crisis climática9.
7 La Tierra ha sobrepasado casi todos los límites seguros para la vida establecidos
científicamente. Nos dirigimos hacia “la zona de peligro”, no sólo para un planeta que se
sobrecalienta y pierde sus áreas naturales, sino para el bienestar de las personas que
viven en él. Cf. Miguel Ángel Criado, “Siete de los nueve umbrales que permiten la vida
humana sobre la Tierra ya han sido sobrepasados”, El País (31.05.2023), https://elpais.com/
ciencia/2023-05-31/siete-de-los-nueve-umbrales-que-permiten-la-vida-humana-sobre-la-
tierra-ya-han-sido-sobrepasados.html.
8 António Guterres, “Si no actuamos, nos quedamos sin planeta: la ONU lanza un plan a
diez años para restaurar los ecosistemas deñados”, Noticias ONU (04.06.2021), https://
news.un.org/es/story/2021/06/1492922#:~:text=Precisamente%2C%20Ant%C3%B3nio%20
Guterres%20alert%C3%B3%20en,el%20aumento%20de%20la%20contaminaci%C3%B3n.
9 Francisco, “Exhortación apostólica Laudate Deum sobre la crisis climática” (Cochabamba:
Verbo Divino, 2023).
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Citaré también de la tercera encíclica del Papa Francisco, Fratelli
Tutti10 (Hermanos Todos), inspirado en los postulados de San Francisco
de Asís. Ahí él analiza las distintas crisis del mundo actual y trata de
aportar elementos para tratar de construir una hoja de ruta común,
basada en el amor al prójimo, el respeto y la fe. Si bien la Encíclica
es amplia y detallada en su temática y contiene largas reflexiones
sobre la economía y la política, por hoy vamos a concentrarnos en el
posicionamiento relativo a la crítica radical del neoliberalismo y del
capitalismo desenfrenado por parte del Papa, quien hace un contundente
juicio del mercado.
El mercado solo no resuelve todo, aunque otra vez nos quieran hacer
creer este dogma de fe neoliberal. Se trata de un pensamiento pobre,
repetitivo, que propone siempre las mismas recetas frente a cualquier
desafío que se presente. El neoliberalismo se reproduce a sí mismo
sin más, acudiendo al mágico “derrame” o “goteo” –sin nombrarlo–
como único camino para resolver los problemas sociales. No se
advierte que el supuesto derrame no resuelve la inequidad, que es
fuente de nuevas formas de violencia que amenazan el tejido social.
[…] La especulación financiera con la ganancia fácil como fin
fundamental sigue causando estragos (FT 168).
Frente a esta visión del mundo, la encíclica Fratelli tutti propone
un nuevo paradigma: el del frater, el hermano, el de la fraternidad
universal y la amistad social. Desplaza el centro: de una civilización
técnico-industrial e individualista a una civilización de solidaridad, de
preservación y cuidado de toda la vida. El Papa aboga por “volver a
llevar la dignidad humana al centro y que sobre ese pilar se construyan
las estructuras sociales alternativas que necesitamos” (FT 168).
10 Francisco. “Carta encíclica Fratelli tutti sobre la fraternidad y la amistad social” (Lima: Paulinas,
2020).
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1. En torno a la Carta Encíclica Laudato Si’ del Papa Francisco
En 2015 el Papa Francisco escribió Laudato Si’, un importante
documento sobre la necesidad de proteger el medio ambiente, afrontar
los peligros y desafíos del cambio climático y reducir el uso de
combustibles fósiles. Una encíclica es la forma más elevada de escrito
papal. El documento se centra en el cuidado del entorno natural y de las
personas, así como en cuestiones más amplias de la relación entre Dios,
los seres humanos y la Tierra. El subtítulo de la encíclica, “Sobre el
cuidado de la Casa Común”, refuerza –convincentemente– estos temas
claves.
La primera parte de la encíclica expone los argumentos tendentes
a explicar el cambio climático de carácter antropogénico; lamenta la
degradación del medio ambiente y el calentamiento global, al mismo
tiempo que critica el consumismo. El documento advierte de las muy
“graves consecuencias para todos nosotros” (LS 24) si las cosas siguen
como (ahora mismo) están.
En los nueve años transcurridos desde la publicación del documento,
el mundo entero ha sido testigo de un alarmante y dramático aumento de
los fenómenos meteorológicos extremos, tales como olas de calor más
intensas y prolongadas, incendios forestales más frecuentes y huracanes
más severos.
El cambio climático es, sin duda alguna, uno de los temas más
destacados en relación con Laudato Si’. La encíclica habla en detalle
del imperativo moral e intelectual de abordarlo. La amenaza de la crisis
climática se ha agravado desde la publicación de la encíclica, tanto que
hoy no sólo estamos viviendo/sufriendo la era del calentamiento global,
sino también y más aún la era de la “ebullición global”, con un nivel de
temperaturas mucho más elevadas. Esto marca que la crisis ambiental
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alcanzó un “punto realmente crítico”, que provoca y es causa de eventos
ambientales verdaderamente extremos, tales como los cambios drásticos
y violentos en el clima y el derretimiento acelerado de los casquetes
polares11.
Más aún, el 7 de julio de 2023 la media diaria de la temperatura
en el mundo fue de 17,25º C, la más alta jamás registrada. El mes de
julio la temperatura del planeta superó en 1,5º C la media del periodo
preindustrial (1850-1900). Julio de 2023 batió ampliamente el récord del
mes más caluroso registrado en la Tierra, con 0,33º C más que el anterior
récord de julio de 201912. El referido mes de julio estuvo marcado por
una serie de olas de calor e incendios prácticamente en todo el mundo,
con una temperatura media del aire de un 0,72º C más alta que las
medias de julio entre 1991 y 2020. En general, la temperatura global
ha sido un grado y medio más cálida que la media preindustrial. Y las
predicciones estiman que nos acercaremos a la barrera de los 3º C a lo
largo de este siglo. Los cambios en el clima serán numerosos y cada vez
más extremos. Algunos de ellos ya los estamos sufriendo13.
11 El Servicio de Cambio Climático Copernicus y la Organización Meteorológica Mundial
confirmaron que julio 2023 reportó la temperatura promedio global más alta desde que
comenzaron los registros. El mundo se encuentra en un “proceso de ebullición climática”,
y no sólo de cambio climático, como se ha venido denominando hasta ahora. Esto significa
que los efectos del cambio climático están ocurriendo a un ritmo más rápido y acelerado de
lo que se había previsto, y que los impactos están siendo cada vez más severos, mismos que
podemos evidenciar en todas partes del mundo. “ONU advierte que entramos en era de la
«ebullición global»”, Deutsche Welle (27.07.2023), https://www.dw.com/es/onu-advierte-que-
entramos-en-la-era-de-la-ebullici%C3%B3n-global/a-66370693.
12 Cf. “Julio de 2023 el mes más cálido jamás registrado, supera con 0,33º C el anterior récord”,
Euronews (08.08.2023), https://es.euronews.com/green/2023/08/08/julio-de-2023-el-mes-
mas-calido-jamas-registrado-supera-con-033-c-el-anterior-record.
13 Calor. Incendios forestales. Lluvias torrenciales. Tifones y huracanes. Gran parte del hemisferio
norte fue golpeado por condiciones climáticas extremas este verano. Nigel Arnell, “Olas de
calor, sequías, inundaciones... las consecuencias de que la temperatura media aumente 3ºC”,
National Geographic (12.07.2023), https://www.nationalgeographic.com.es/ciencia/asi-seria-
el-planeta-si-la-temperatura-aumenta-3-grados_17523.
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Laudato si’ afirma el “consenso científico muy sólido” de que el
cambio climático está ocurriendo14, así como la evidencia de que la
actividad humana (las emisiones antropogénicas, es decir, las generadas
por las actividades del ser humano) es la responsable de esta situación
y el principal motor de este calentamiento global (LS 23). El cambio
climático es “uno de los principales desafíos actuales para la humanidad”
(LS 25)15.
La encíclica también subraya que los esfuerzos, hasta hoy existentes,
para reducir el cambio climático han sido inadecuados e insuficientes.
Esto se debe a que “muchos de aquellos que tienen más recursos y poder
económico o político parecen concentrarse sobre todo en enmascarar los
problemas o en ocultar los síntomas” (LS 26).
Por ello, ecologistas como Edgar Morin16 y Jeffrey Sachs17 han
dicho que, con esta encíclica, el Papa se pone en la punta de la discusión
mundial sobre el destino de la tierra y también sobre la ecología. Y eso
es verdad, porque Francisco no escribe sólo para los cristianos, sino más
bien para toda la humanidad; por lo tanto, se ofrece como parte de un
diálogo continuo dentro de la Iglesia Católica y entre los católicos y el
mundo en general. La encíclica es para todos, se dirige a “cada persona
14 Aunque también hay que decir que (hoy como ayer) no faltan los negacionistas climáticos,
es decir aquellos que niegan el cambio climático antropogénico, en tanto que afirman –
estúpidamente– que es parte de la ciclicidad del planeta.
15 Sergio Parra, “El 99,9 % de los estudios científicos lo confirma: el cambio climático está causado
por el ser humano”, National Geographic (02.11.2022), https://www.nationalgeographic.
com.es/ciencia/999-estudios-cientificos-confirma-cambio-climatico-esta-causado-por-ser-
humano_18994.
16 Edgar Morin es admirador de la encíclica Laudato Si’ y afirma: “Vivimos hoy en una especie
de desierto del pensamiento y nos hemos olvidado de la que el Papa llama «casa común»”.
“Edgar Morín: «al servicio de un mundo mejor»”, Umbrales (12.07.2021), https://umbrales.
edu.uy/2021/07/12/edgar-morin-al-servicio-de-un-mundo-mejor/.
17 Cf. Jeffrey D. Sachs, “IV. Las amenazas ambientales globales causadas por el desarrollo
económico”, en La era del desarrollo sostenible. Nuestro futuro está en juego: incorporemos
el desarrollo sostenible a la agenda política mundial (Barcelona: Deusto, 2015), 57-65.
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que habita este planeta” (LS 3). Más explícito aún, está dirigida “a todas
las personas de buena voluntad” (LS 62).
El Papa Francisco se da cuenta –lúcidamente– de la emergencia
planetaria que vivimos y sufrimos, de las amenazas que pesan sobre el
sistema vida en su conjunto, el “sistema tierra”18. Y es por eso que él ha
sentido la íntima y profunda responsabilidad de ayudar a reflexionar, a
cambiar urgentemente de hábitos de vida y a tener otra relación –en lo
posible armoniosa y amorosa– con la Madre Tierra.
Es precisamente por ello que, aquí, queremos hacer una reflexión
no tanto sobre la Encíclica en sí misma, que es comúnmente conocida,
y tampoco pretendemos asumir y menos desarrollar una perspectiva en
clave teológica (no somos, ni queremos ser teólogos), cuanto sí pensar,
obviamente a partir de la Encíclica, en torno a lo que aquí, en Bolivia,
estamos asumiendo –en términos de la defensa de la Madre Tierra–
desde y a partir de una diversidad de grupos y colectivos, donde el tema
de la ecología es obviamente central.
¿Qué estamos entendiendo por ecología? La ecología entraña una
relación profunda e integral entre la sociedad humana y la naturaleza.
En palabras del Papa:
Dado que todo está íntimamente relacionado, y que los problemas
actuales requieren una mirada que tenga en cuenta todos los factores
de la crisis mundial, propongo que nos detengamos ahora a pensar
en los distintos aspectos de una ecología integral19, que incorpore
claramente las dimensiones humanas y sociales (LS 137).
18 El sistema Tierra está formado por cuatro subsistemas: geosfera, hidrosfera, atmósfera y
biosfera. Cf. James Lovelock, Gaia (Madrid: H. Blume, 1983).
19 Énfasis nuestro.
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Más todavía, a la ecología integral le es esencial la espiritualidad
ecológica, cuya correcta comprensión está muy bien explicada por el
Papa Francisco en el sentido de que:
No se trata de hablar tanto de ideas, sino sobre todo de las motivaciones
que surgen de la espiritualidad para alimentar una pasión por el
cuidado del mundo. Porque no será posible comprometerse en cosas
grandes sólo con doctrinas sin una mística que nos anime, sin unos
móviles interiores que impulsan, motivan, alientan y dan sentido a la
acción personal y comunitaria (LS 216).
El Papa Francisco habla aquí de la espiritualidad ecológica
evocando a San Francisco de Asís (cf. LS 216-218). Ésta es la gran
novedad, diríamos la buena nueva, de la encíclica. Y está en la línea de
su pensamiento más fundamental, en el sentido que propone una “Iglesia
en salida” hacia las “periferias existenciales”20, es decir una Iglesia que
sale del palacio de Herodes y va a la casa de huéspedes, es decir que sale
de ese castillo que se ha creado para un hospital de campaña. Entonces
está abierto para todos, esto es que de ahí sale al mundo, dialogando con
todas las tendencias, sean religiosas, políticas, sociales y/o culturales.
Dicho de otra manera, del mundo se pasa a los pobres, porque tienen una
centralidad fundamental en su visión de mundo, de Iglesia. Recordemos
que su primera expresión (como Papa) ha sido “yo quisiera tener una
Iglesia de los pobres, para los pobres”21.
El Papa Francisco dijo, en una de sus primeras conferencias de
prensa, que quiere una Iglesia Católica más austera, que ésta debería ser
20 El Papa Francisco empieza a hablar de las “periferias existenciales” ya desde su primera
Audiencia General (27.03.2013), donde dijo que “debemos aprender a salir de nosotros
mismos para ir al encuentro de los otros, para ir hacia las periferias de la existencia”.
Francisco, “Audiencia general”, https://www.vatican.va/content/francesco/es/audiences/2013/
documents/papa-francesco_20130327_udienza-generale.html.
21 “Papa Francisco: «Una Iglesia pobre y para los pobres»”, Deutsche Welle (16.03.2013),
https://www.dw.com/es/papa-francisco-una-iglesia-pobre-y-para-los-pobres/a-16678745.
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pobre, y recordando que su misión es, justamente, servir a los pobres.
También se refirió a la elección de su nombre por San Francisco de Asís,
un símbolo de paz, austeridad y pobreza. Jorge Mario Bergoglio dijo que
Francisco es “el hombre que nos da su espíritu de paz, un hombre pobre”,
y añadió “cómo me gustaría una Iglesia pobre, y para los pobres”22.
El Papa ya tenía la cuestión de los pobres en sus diferencias con
Cristina Kirchner23, que hacía políticas públicas y decía que eso es
asistencialismo; “yo quiero –decía– justicia social”24. La justicia social
exige cambios profundos y transformaciones radicales en la sociedad,
en las estructuras económicas, políticas y culturales, así como en las
formas de producción y consumo, y es precisamente esa perspectiva, de
carácter ético-político, la que ha llevado a su pontificado.
Por supuesto, no podía faltar el lugar central de los pobres.
Recordemos que los teólogos de la liberación ya nos decían que el eje
central de la teología de la liberación es la opción por los pobres, contra
la pobreza y en favor de la justicia social. Ahora, dentro de los pobres,
hay que comprender –otra vez con Leonardo Boff25– al gran pobre, que
no es otro que la Tierra hoy devastada, saqueada y cruelmente explotada,
abusada y violentada.
Así, la opción fundamental de la teología de la liberación puede
y/o tiene que desarrollarse en el sentido de una “eco-teología” y, más
propiamente, de una “eco-teología de la liberación” (como bien refiere
22 Deutsche Welle, “Papa Francisco: «Una Iglesia pobre y para los pobres»”.
23 Cristina Fernández de Kirchner es una política y abogada argentina, Presidenta de la Nación
Argentina entre el 10 de diciembre de 2007 y el 9 de diciembre de 2015, y Vicepresidenta de
la Nación Argentina entre el 10 de diciembre de 2019 y el 10 de diciembre de 2023.
24 “Las claves de la tensión entre Bergoglio y los Kirchner”, BBC (14.03.2013), https://www.
bbc.com/mundo/noticias/2013/03/130314_tensiones_entre_el_kirchnerismo_y_jorge_mario_
bergoglio_bd.
25 Cf. Leonardo Boff, “¿Crisis del paradigma de civilización?”, en Ecología: grito de la Tierra,
grito de los pobres (Madrid: Trotta, 2011), 9-14.
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Leonardo Boff26). No es que se haya hecho una añadidura, en el sentido
que en esa teología se pone ahora la ecología; no, sino más bien que, desde
dentro de la opción primordial (por los pobres), hoy se trata de cuidar
del gran pobre, que es la Tierra doliente y enferma. Y que el Papa lo dice
claramente e incluso en una forma muy dura. “Nunca hemos maltratado
y lastimado nuestra Casa Común como en los últimos dos siglos” (LS
53). “Hay que considerar también la contaminación producida por los
residuos, incluyendo los desechos peligrosos presentes en distintos
ambientes. […] La tierra, nuestra casa, parece convertirse cada vez más
en un inmenso depósito de porquería” (LS 21) (énfasis nuestro).
La encíclica quiere ser así una respuesta a la crisis ecológica global.
Más aún, si entendemos y asumimos que “las previsiones catastróficas
ya no pueden ser miradas con desprecio e ironía. […] el estilo de vida
actual, por ser insostenible, sólo puede desembocar en catástrofes” (LS
161). La exigencia es por tanto “una conversión ecológica global” (LS 5;
216), profunda y radical. Y que por ello mismo implica “nuevos estilos
de vida” (lo repite 35 veces) y urge “cambiar el modelo de desarrollo
global” (LS 194).
Aquí lo interesante es que la encíclica sigue más o menos el ritual
metodológico de la teología de la liberación. Empieza con ver la realidad,
cómo está nuestro mundo, y después hace un análisis de esa realidad.
Asume por tanto el ver, juzgar, actuar y celebrar.
En la segunda parte el Papa hace un análisis con doble expresión:
una analítica científica y otra teológica. De ahí, de ese ejercicio profético
(denuncia y anuncia), infiere conclusiones muy importantes sobre qué
26 En este sentido, la Eco-teología de la Liberación tiende a dialogar y aprender con los nuevos
saberes de las ciencias de la Tierra y de la vida y también a contribuir con los valores del
respeto, de la veneración y del cuidado, propios de la fe, valores fundamentales para una
ecología integral. Cf. Leonardo Boff, La dignidad de la tierra. Ecología, mundialización,
espiritualidad. La emergencia de un nuevo paradigma. (Madrid: Trotta, 2000), 187.
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hacer, cómo enfrentar la crisis climática, y culmina todo ese proceder
(teórico y metodológico) con una profunda y grandiosa espiritualidad,
con una pasión sagrada por el mundo, por la Tierra, con el cuidado de
todo lo que vive y existe (humano y no humano). Constituye la síntesis
y culminación de su valiosa e importante reflexión ética, política y
teológica.
Así, el Papa ha seguido las cuatro ecologías propuestas y trabajadas
por Leonardo Boff: ambiental, social, mental e integral27. No se
trata pues de una encíclica verde que se restrinja al medioambiente
–reiteramos, Francisco se sitúa más allá del “discurso «verde»” (LS
49)– predominante en los debates actuales; sino más bien él nos propone
una ecología integral, diríamos profunda, es decir radical, que abarca lo
ambiental, lo social, lo político, lo cultural y lo espiritual.
De ahí también emerge la importancia de la encíclica del Papa, que
–actualmente– es el mejor manual de ecología, porque no solamente hace
ecología en el sentido de reflexionar sobre las condiciones de la vida de
y en relación con el planeta, sino también tiene un componente ético,
e igualmente porque discurre en torno a cómo volver a relacionarnos
–armoniosa y amorosamente– con la Madre Tierra. La encíclica
tiene asimismo un componente político, articulado en torno a cómo
producir –comunitariamente– los bienes comunes y cómo cambiar las
formas depredadoras de consumo; tiene igualmente un componente
pedagógico, cómo hay que pensar la realidad, la ecología mental, lo
que pasa en nuestras cabezas, qué proyectos, qué prejuicios, qué sueños
tenemos, que pueden ser buenos para la Tierra o pueden ser agresivos
para los ecosistemas, las biodiversidades y el conjunto de los vivientes
(humanos y no humanos). Y, no hay que olvidar la espiritualidad, o sea
las motivaciones profundas que nacen no tanto de la razón analítica,
27 Hay un excelente video sobre las cuatro ecologías: “Quatro ecologias”, en: https://youtu.be/
P8Hf0TqvAJE (26.02.2015).
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cuanto de la razón cordial, es decir el corazón, donde están nuestras
hondas dimensiones de la ética, la espiritualidad, la compasión, en fin,
el amor.
Francisco nos da así una respuesta desde la fe, pero a la vez
recogiendo los datos más seguros de las ciencias, es decir de la nueva
cosmología, la biología, la física, la química y la antropología, o sea
la reflexión sobre la evolución humana y la misma sociedad. Y eso ha
escandalizado bastante; por ejemplo, los norteamericanos suelen decir,
“el Papa se pone a hablar de ciencias, cuando su campo es la teología y la
religión”, pero él contesta diciendo: “yo hablo de la ciencia y la leo con
claves teológicas, es decir con los ojos de la fe”28. Entonces, el problema
no es la ciencia, es la manera cómo se mira la ciencia. Y aquí él hace
un voto de confianza en la ciencia, en el sentido de que puede salvarnos
del riesgo de extinguirnos (por nuestra propia y tonta autodestrucción).
El Papa hace a la par una crítica dura de la tecnociencia29, la ciencia
que se ha transformado en el instrumento de dominación y de agresión
al Sistema Tierra. Él dice que el gran problema es la tecnociencia, si
bien nos ha traído oportunidades, nos ha dado antibióticos, en fin, nos
ha salvado la vida, ha mejorado nuestras relaciones y lo tenemos que
reconocer e incluso agradecer. Pero, también hay que reconocer que la
tecnociencia –en muchas ocasiones– se alejó de la ética. Hoy no es sino
una ciencia sin ética, sin responsabilidad; produce no para la vida sino
para el mercado, cuando no para la guerra y para destruir la naturaleza. Y
ahí Francisco reitera que este tipo de ciencia se ha propuesto –desde hace
ya tres siglos– a conquistar el mundo, dominar la naturaleza, dominar
28 “«No puede ni debe haber oposición entre fe y ciencia»: Papa Francisco”, Semana
(02.07.2021), https://www.semana.com/vida-moderna/articulo/no-puede-ni-debe-haber-
oposicion-entre-fe-y-ciencia-papa-francisco/202157/.
29 Cf. “El Papa advierte sobre la tecnociencia”, Europa Press Sociedad (26.01.2016),
https://www.europapress.es/sociedad/noticia-papa-advierte-tecnociencia-mensaje-
cuaresma-20160126172623.html.
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José Luis Saavedra 109
a los pueblos y tener un doble proyecto: de un (irracional) crecimiento
ilimitado, ya que la tierra es considerada como un baúl, que tiene infinitos
recursos, que podemos sacar y sacar (extraer con violencia), y siempre
tiene/tendrá recursos (ilusión suicida y por ello necia).
Es en este sentido que el Papa hace la crítica radical y dice que
hay que mirar qué tipo de ciencia estamos desarrollando. Si bien
–reiteramos– alaba la parte científica, y dice que la necesitamos porque
la complejidad de la vida así lo exige, también expresa que requerimos
una ciencia con conciencia y ordenada para el cultivo y el florecimiento
de la vida en toda su diversidad, y no como (actualmente) una amenaza
de destrucción de las propias condiciones de vida.
Así, con la tecnociencia se han desarrollado las tecnologías más
avanzadas de agresión a la tierra, no solamente para producir lo que
requerimos para satisfacer nuestras necesidades, nuestras conveniencias,
como lo hacen los pueblos y las comunidades indígenas (austeridad
esencial), sino también para explotar en función de un irracional
enriquecimiento ilimitado. Aquí aparece esa doble convicción, que
los recursos no son infinitos, porque la tierra es un planeta finito, con
recursos limitados y gran parte no son renovables; y hoy llegamos a
ese límite, no podemos seguir adelante en el futuro porque la tierra
no aguanta más y –¡por Dios!– urge tomar conciencia de este límite
ecosistémico y biofísico30.
La ciencia es válida, valiosa e interesante cuando es destinada a la
vida, pero hoy (en las actuales condiciones de dominación, explotación
u opresión del sistema capitalista, colonialista e imperialista) es la
30 Aquí hay necesidad de hacer referencia al Día de la Sobrecapacidad de la Tierra, límite
anual que cada año se va achicando. Cf. Erika Montejo, “Día de la Sobrecapacidad de la
Tierra 2023: Hoy se acabaron los recursos para este año”, NatGeo (02.08.2023), https://www.
ngenespanol.com/ecologia/dia-de-la-sobrecapacidad-de-la-tierra-2023-hoy-agotamos-los-
recursos/.
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A nueve años de la Encíclica Laudato si'110
gran amenaza sobre el sistema vida/tierra. Es también por eso que
varios científicos, principalmente a partir de un holandés que ganó el
premio Nobel de química, Paul Crutzen31, han creado un término que
ya ha entrado dentro del discurso ecológico en el sentido de que hemos
iniciado una nueva era ecológica, la era del Antropoceno32, que significa
que la amenaza de la tierra, de la vida en la tierra, no viene de afuera,
digamos de un meteoro rasante, sino que la gran amenaza de la vida de
la tierra es el propio ser humano, que se ha hecho satán de la tierra y no
el buen ángel de la guardia.
2. Horizontes de vida y esperanza
Para hablar de horizontes, Francisco empieza con la forma de
producción que no puede, ni debe sacrificar de tal manera los ecosistemas
que no tengan tiempo de rehacerse y menos de continuar ofreciendo
alimentación para todas las formas de vida, porque la tierra no ha sido
creada solamente para nosotros, los humanos, sino para todos los seres
vivientes: humanos y no humanos. Y para nosotros –los andinos– todo
tiene vida: el agua, el suelo, el viento, todo.
El Papa hace una crítica durísima al antropocentrismo junto con la
crítica a la tecnociencia, que significa que el ser humano es el único
centro de todo y que los demás seres sólo tienen sentido mientras se
ordenan en función de la satisfacción (egoísta, utilitaria y acaparadora)
31 Paul Crutzen ha sido un químico neerlandés, ganador del premio Nobel de química en 1995
por sus trabajos sobre la química de la atmósfera, y específicamente por sus esfuerzos en el
estudio de la formación y descomposición del ozono atmosférico.
32 Según los científicos, la “Gran Aceleración” de las actividades humanas ha provocado una
serie de transformaciones en los procesos naturales de la Tierra que se verán reflejados en
un nuevo estrato geológico. Algunos marcadores básicos del Antropoceno serían el aumento
de la erosión y los movimientos de sedimento debidos a la urbanización y la agricultura,
el calentamiento global o la pérdida de la biodiversidad. Cf. Sushmitha Ramakrishnan,
“Antropoceno: hallan evidencia geológica del cambio humano”, Deutsche Welle (13.07.2023),
https://www.dw.com/es/antropoceno-hallan-evidencia-geol%C3%B3gica-del-cambio-
causado-por-el-ser-humano/a-66213243.
yachay Año 41, nº 79, 2024, p. 95-127
José Luis Saavedra 111
del ser humano. Ahí, dice –acertadamente–, es el gran equívoco, porque
cada ser tiene un sentido en sí mismo, un valor en sí mismo, más allá de
la utilización que nosotros podamos tener de esos seres. Y por eso hay
que respetarlos a todos, porque pertenecen a esa gran comunidad de vida
que la tierra ha creado o al menos posibilitado.
El centro no es el ser humano. El centro del proceso de la evolución
es la vida, en todas sus formas, campos y dimensiones, y sólo como un
subcapítulo de la vida es el ser humano, que tiene una singularidad de
ser una vida que es consciente, prudente y cuidadosa, y por eso mismo
tiene la capacidad, la misión ética de defender y cuidar de los demás
seres como está en el Génesis 2,8.15: en el jardín del Edén el ser humano
es puesto ahí para preservar, resguardar y proteger esa herencia sagrada,
que es el universo que Dios nos ha dado.
El Papa incide en la parte pedagógica, principalmente en enseñarnos
cómo tenemos que cambiar nuestros valores, cambiar nuestras actitudes,
que es una cualidad no de dominación de la tierra, como si uno fuera
dueño o pudiera disponer (como “dueño y señor”), asumiéndolos (a todos
y todas) como hermanos y hermanas, y lo más importante: acompañando,
convergiendo y colaborando recíprocamente unos con otros. Y nosotros
cuidando, que incluso los más débiles tengan su lugar en el proceso
de evolución. Entonces, contra el darwinismo ecológico, reconociendo
que Darwin fue malinterpretado por Spencer, Darwin no dijo que la
más fuerte gana, para él –entendiéndolo correctamente– ganaba el más
adaptado. “La teoría de Darwin se basó en el mecanismo de la selección
natural, la cual explica cómo las poblaciones pueden evolucionar de tal
modo que se vuelven mejor adaptadas a su medio ambiente a través del
tiempo”33.
33 Ana Barahona, “Darwin y el concepto de adaptación”, Ciencias, nº 3 (1983): 10-13.
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A nueve años de la Encíclica Laudato si'112
El Papa Francisco propone la cooperación como un eje central de
la mente humana, una actitud de la tierra, principalmente de respeto
y cuidado. Ahí la frase es importante: “Cuidado de la Casa Común”,
porque no es solamente un tema que nos atañe a nosotros (los creyentes),
sino también tiene que ver con la esencia del ser humano, a partir de
un mito que viene desde los romanos, pasando por San Agustín y la
reflexión medieval, culminando en los filósofos alemanes románticos
y la formulación más elaborada, más honda, más sistemática, que es
Heidegger, quien en su obra Ser y tiempo (1927) se pregunta sobre cuál
es la esencia del ser humano.
Heidegger dice que la esencia del ser humano no es el espíritu, ni la
libertad, ni la creatividad, sino la esencia del ser humano es el cuidado,
porque atañe al conjunto de factores que permiten la emergencia del ser
humano34. El cuidado es el anticipador de nuestras acciones, para que
no sean dañinas y más bien sean buenas, bondadosas y compasivas. Él
concluye diciendo que todos los vivientes existen, el propio universo
existe porque las cuatro fuerzas fundamentales (de las que también Boff
suele hablar): gravitacional, electromagnética, nuclear débil y fuerte, se
han articulado para tener el mundo que tenemos; si no, no estaríamos
aquí para discurrir en torno a este u otros temas.
Todos nosotros somos hijos e hijas del infinito cuidado de nuestras
madres, que cuando nacimos nos han acogido, protegido y atendido. No
nos han abandonado en la cuna, porque si nos hubiesen abandonado no
sabríamos cómo salir de allá y buscar nuestra alimentación, moriríamos
máximo en un par de días. Entonces, todos nosotros somos hijos e hijas
del amor materno.
El cuidado aplicado a la ecología no es una relación del puño cerrado
para dominar, sino de la mano extendida para la caricia esencial, de
34 Jesús Adrián Escudero, “«Ser y tiempo»: ¿una ética del cuidado?”, Aurora, nº 13 (2012): 74-
79.
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José Luis Saavedra 113
los dedos que se entrelazan, para crear una corriente de energía buena,
positiva y vital. Es una relación armoniosa y amorosa con la realidad
que protege, que cura las heridas pasadas e impide las futuras.
El cuidado es esencial, junto con la sostenibilidad, para otro modelo
de civilización (post capitalista) y otra relación (amorosa y armoniosa)
con la Tierra, un trato de cuidado respetuoso en lugar de superexplotarla,
y más bien permitir que pueda descansar, rehacer sus nutrientes, darle
tiempo para restaurarse, restablecerse y reestablecerse. Nosotros no le
damos tiempo para nada, por el contrario, la depredamos, la saqueamos
y la devastamos brutal, salvaje e irracionalmente (inmisericordemente).
Y ahora estamos en el momento que decimos: así como estamos no
podemos ni debemos continuar, es la convicción universal, porque
vamos al encuentro de lo peor: la extinción.
Aquí el Papa coincide –interesantemente– con el movimiento
Rebelión contra la Extinción35, que se describe a sí mismo como un
“movimiento de movimientos sociales” internacional y descentralizado,
que utiliza la desobediencia civil como una forma de presionar a los
gobiernos para que actúen contra la emergencia climática y ecológica36.
En este mismo sentido, casi todos los relatos de los científicos, así
como los de la propia ONU que cada tres años hace la evaluación de la
situación de la Tierra, siempre hacen esa misma advertencia: tenemos
35 Extinction Rebellion es un movimiento internacional y políticamente no partidista,
descentralizado, que utiliza la acción directa no violenta y la desobediencia civil para persuadir
a los gobiernos de que actúen con justicia en la Emergencia climática y ecológica. Cf. Lauren
Chadwick, Emma Beswick y Rafa Cereceda, “¿Qué es Rebelión contra la Extinción? Claves
del movimiento contra el cambio climático”, Euronews (11.10.2019), https://es.euronews.
com/2019/10/11/que-es-rebelion-contra-la-extincion-claves-del-movimiento-contra-el-
cambio-climatico.
36 El grupo tiene tres demandas en el Reino Unido, donde nació: que el Gobierno declare una
“emergencia climática y ecológica”, que el Gobierno detenga la pérdida de biodiversidad y
reduzca las emisiones de gases de efecto invernadero a cero para 2025, y que el Reino
Unido cree una Asamblea de Ciudadanos sobre “justicia climática y ecológica” y escuche sus
propuestas.
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A nueve años de la Encíclica Laudato si'114
que cambiar la forma de producción, de consumo, de relación con la
creación37; de lo contrario, vamos al encuentro de lo peor: colapso
ecológico38. Pero, al parecer nada cambia, todo sigue (igual), y, peor
aún, con una velocidad cada vez más alocada e irracional. Estamos en
el insensato afán de la superexplotación de todo: personas y recursos
naturales.
Aquí añadiría a San Agustín, quien dice que nosotros (los humanos)
frecuentamos dos escuelas: la del sufrimiento, que nos da duras lecciones
de vida; pero, también concurrimos a la del amor, que nos enseña a
dedicarnos al otro y a cuidar la vida39. Hoy estamos viviendo los dos
sentimientos: sufrimiento y dolor por la tierra y –a la vez– afecto, pasión,
compasión y amor por la Madre Tierra.
Aquí es interesante percibir que el Papa Francisco une la inteligencia
cerebral, apoyado en los datos de la ciencia, con la inteligencia sensible
o cordial o espiritual. Nos enseña que debemos leer con emoción los
números y relacionarnos con la naturaleza con “apertura al estupor y a
la maravilla” (LS 11). “Prestar atención a la belleza y amarla nos ayuda
a salir del pragmatismo utilitarista” (LS 215).
El Papa subraya que simultáneamente hay que escuchar el grito
de la Tierra y el grito de los Pobres, y lo dice con una contundencia
realmente extraordinaria.
Pero hoy no podemos dejar de reconocer que un verdadero planteo
ecológico se convierte siempre en un planteo social, que debe integrar
37 El consumo y la producción mundiales (fuerzas impulsoras de la economía mundial) dependen
del uso del medio ambiente natural y de los recursos de una manera que continúa teniendo
efectos destructivos sobre el planeta.
38 Cfr. Maristella Svampa y Enrique Viale, El colapso ecológico ya llegó (Buenos Aires: Siglo
XXI, 2020).
39 Cfr. Juan Granados Valdez, “La actualidad de la pedagogía de San Agustín”, Reflexiones
marginales, n. 56 (01.04.2020): 13-24.
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la justicia en las discusiones sobre el ambiente, para escuchar tanto el
clamor de la tierra como el clamor de los pobres (LS 49)40.
Esta rica perspectiva, a la vez teológica y política, lúcidamente
propuesta por el Papa, es también el título del importante libro de Boff,
Ecología: grito de la tierra, grito de los pobres41. Así:
La ecología no trata únicamente de las cuestiones relacionadas con lo
verde o las especies en extinción. La ecología supone un paradigma
nuevo, es decir, una forma de organizar el conjunto de relaciones de
los seres humanos entre sí, con la naturaleza y con su sentido en este
universo. Ella inaugura una nueva alianza con la creación, alianza de
veneración y de fraternidad. No hemos sido creados para situarnos
por encima de la naturaleza como quien domina, sino para estar a su
lado como quien convive como hermano y hermana. Descubrimos
así nuestras raíces cósmicas y nuestra ciudadanía terrestre. Hoy
no son sólo los pobres los que deben ser liberados de la cautividad
de un modelo de desarrollo que les niega la dignidad, dilapida sus
recursos y quiebra el equilibrio elaborado a lo largo de millones
de años de trabajo cósmico. El clamor de los pobres se une así al
grito de la Tierra. Y a partir de ahí se ensancha la teología de la
liberación verdaderamente integral y universal, porque concierne
a todos y al planeta entero. La experiencia ecológica permite una
nueva recuperación de lo sagrado en la creación, una nueva imagen
de Dios, una concepción más amplia y cósmica del misterio cristiano
y una nueva espiritualidad42.
El Papa Francisco dice mucho más: las heridas y los dolores de
la Tierra, los gemidos de la naturaleza tienen que ser nuestro dolor,
40 Énfasis original.
41 Leonardo Boff, “Eco-espiritualidad: sentir, amar y pensar como Tierra”, en Ecología: grito de
la Tierra, grito de los pobres (Madrid: Trotta, 2011), 106-116.
42 Leonardo Boff, Ecología: grito de la Tierra, grito de los pobres, contratapa. Énfasis original.
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nuestro sollozo, porque formamos una gran comunidad, una fraternidad
universal (cf. LS 19).
Ahí adviene la dimensión profundamente revolucionaria de la
encíclica del Papa Francisco. Él habla de la revolución de la ternura,
de tener y cultivar afecto, cariño, amor, y también (reitera) de tener
cuidado. Pensamos así en el tema de la ternura y de la bondad bien
expresados en la encíclica Fratelli tutti, principalmente el tema de la
amistad social. Pero, muchos seres humanos de nuestro mundo son
usual y lamentablemente crueles (desalmados) y sin piedad. El Papa
lo ha dicho claramente cuando fue a la isla de Lampedusa (Italia), en
el primer viaje de su pontificado, es decir en su primer viaje como
Papa fuera del Vaticano43, al ver a los que llegaban del África (miles
de inmigrantes africanos y asiáticos irregulares arriban a la isla italiana
todos los años) y se morían (naufragaban) ahí. “Una herida abierta en
nuestra humanidad”, se refiere el Papa Francisco sobre los recientes
naufragios en el Mediterráneo, refiriéndose a la crisis migratoria en la
región44. Durante el rezo del Ángelus del domingo 13 de agosto de 2023,
el Pontífice volvió a pedir a los políticos que “curen” esta herida, “con
espíritu de solidaridad y fraternidad”45. Y, más recientemente, el Papa lo
ha vuelto a manifestar.
43 El Papa eligió Lampedusa para hablar de la “globalización de la indiferencia” que le llevaría,
a lo largo de los años, a denunciar en numerosas ocasiones la indiferencia hacia el prójimo y
a condenar la cultura del descarte.
44 Angélica Parra Hernandez, “El Papa critica la indiferencia con la crisis migratoria en la Jornada
del Migrante y el Refugiado”, Euronews (24.09.2023), https://es.euronews.com/2023/09/24/
el-papa-critica-la-indiferencia-con-la-crisis-migratoria-en-la-jornada-del-migrante-y-el-r;
“Francisco insta a los Gobiernos de Europa a acoger a los migrantes”, Euronews (23.09.2023),
https://es.euronews.com/2023/09/23/francisco-insta-a-los-gobiernos-de-europa-a-acoger-a-
los-migrantes; “El Papa subraya el derecho fundamental que supone emigrar”, Euronews
(24.09.2023), https://es.euronews.com/2023/09/24/el-papa-subraya-el-derecho-fundamental-
que-supone-emigrar.
45 Francisco, “Ángelus” (13.08.2023), https://www.vatican.va/content/francesco/es/
angelus/2023/documents/20230813-angelus.html#:~:text=%C3%81ngelus%2C%2013%20
de%20agosto%20de%202023%20%7C%20Francisco&text=Queridos%20hermanos%20
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José Luis Saavedra 117
El Papa dice: la cultura occidental ya no sabe llorar, es cínica y
sin piedad, porque de cara al sufrimiento de todos esos migrantes y/o
refugiados, los ve como un estorbo y no como hermanos y hermanas
que sufren y padecen (y “lleva a la indiferencia hacia los otros”),
sufrimos una cultura cruel: desalmada y violenta. “En este mundo de
la globalización hemos caído en la globalización de la indiferencia.
¡Nos hemos acostumbrado al sufrimiento del otro, no tiene que ver con
nosotros, no nos importa, no nos concierne!”46. Somos incapaces de
derramar lágrimas por las mujeres, hombres y niños víctimas del mar y
de nuestro egoísmo.
¿Quién de nosotros ha llorado por las jóvenes madres que llevaban
a sus hijos sobre las barcas? Estamos anestesiados ante el dolor de
los demás.
¿Quién de nosotros ha llorado por este hecho y por hechos como
éste? ¿Quién ha llorado por la muerte de estos hermanos y hermanas?
¿Quién ha llorado por esas personas que iban en la barca? ¿Por las
madres jóvenes que llevaban a sus hijos? ¿Por estos hombres que
deseaban algo para mantener a sus propias familias? Somos una
sociedad que ha olvidado la experiencia de llorar, de “sufrir con”:
¡la globalización de la indiferencia nos ha quitado la capacidad de
llorar!
Tantos de nosotros, me incluyo también yo, estamos desorientados,
no estamos ya atentos al mundo en que vivimos, no nos preocupamos,
no protegemos lo que Dios ha creado para todos y no somos
capaces siquiera de cuidarnos los unos a los otros. Y cuando esta
desorientación alcanza dimensiones mundiales, se llega a tragedias
y%20hermanas%2C%20%C2%A1buenos,14%2C22%2D33).
46 “Hace nueve años el Papa en Lampedusa, una isla que no hay que olvidar”, Andrea de Angelis, https://
www.vaticannews.va/es/papa/news/2022-07/aniversario-viaje-papa-lampedusa-isla-no-
olvidar-migrantes.html.
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A nueve años de la Encíclica Laudato si'118
como ésta a la que hemos asistido (lamentó el Papa frente a las aguas
que se habían tragado a trescientos hombres en busca de esperanza)47.
Y eso nace de una muy profunda convicción, en el sentido que no
tenemos otra casa más que ésta, que es la única, y que también es como
la espiritualidad profunda y sagrada de la propia Madre Tierra.
El Papa Francisco nos insta a que cambiemos nuestra relación con
la Tierra, o sea, a pasar de una relación de explotación a una relación
de cooperación, de sinergia, de transferir a la tierra las virtudes que
tendríamos que tener para con nuestras mamás. Si consideramos el
suelo, la tierra como suelo, podemos cavar, podemos comprar, podemos
vender; pero, si decimos que el suelo, que la tierra es matriz, uno no la
puede vender48, no puede comprar, uno la ama, la cuida, la protege. Esas
virtudes hay que transferirlas de nuestras madres a la gran Madre Tierra.
Si hacemos eso tendremos futuro, y si no hacemos eso podemos estar
yendo hacia el abismo.
El Papa Francisco hace una convocatoria a todos para vivir esa
espiritualidad con pasión, tenemos que tener compasión. Y ahí él hace
una muy importante referencia a eso que hoy se está discutiendo en el
campo de la filosofía, ya sea en Europa o aquí, en América Latina, el
rescate de la razón sensible, la reivindicación de la razón cordial, que
nosotros lo retomamos de Leonardo Boff49. Francisco nos invita a tener
que despertar la razón sensible y cordial, a superar la indiferencia y a
sentir con el corazón el dolor de los otros.
47 Homilía del Santo Padre Francisco, Campo de deportes “Arena” (08.07.2013), https://www.
vatican.va/content/francesco/es/homilies/2013/documents/papa-francesco_20130708_
omelia-lampedusa.html.
48 Xavier Albó, “La Pacha Mama no se vende como cualquier camisa”, en Obras Selectas. Tomo
IX: 1993-1995 (La Paz: Fundación Xavier Albó, CIPCA, 2020), 135-157.
49 José Guzmán, “Leonardo Boff: el cuidado y la razón cordial”, Revista Ajpu (11.03.2016): 2-23.
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Hay una urgente necesidad de desarrollar, de completar la razón
analítica, la razón instrumental, la inteligencia cerebral, y complementarla
con la razón de la inteligencia cordial, porque ella nos lleva a amar la
tierra, a reverenciarla y a venerarla. Nos compromete a salir de nosotros,
a defender los ecosistemas, las biodiversidades, a defender cada ser vivo
(humano y no humano), porque es un hermano y hermana de todos y
cada uno de nosotros.
Y esto no es sólo la mística franciscana, que el Papa describe muy
bien en la encíclica, sino que es un dato real de la ciencia. Cuando en
1952 Watson y Crick, dos grandes biólogos, descodificaron el código
genético50, descubrieron algo que fue una gran sorpresa para todas las
ciencias: que todos los seres vivos, desde la bacteria más originaria,
que irrumpió hace 3,8 mil millones de años, pasando por los grandes
bosques, los dinosaurios, llegando a nosotros, todos, absolutamente
todos los seres vivos, tienen el mismo código genético de base51, los 20
aminoácidos y las cuatro bases constatadas (adenina, timina, citosina y
guanina). En un lenguaje más popular, dicen que tenemos los mismos 20
ladrillos y cuatro diferentes formas de cemento, con lo cual combinamos
los ladrillos, y ahí emerge la exuberante biodiversidad de la vida.
Conclusión maravillosa, ¡todos somos hermanos y hermanas! Eso
lo ha intuido San Francisco hace 800 años, llamando a todos con el
dulce nombre de hermano y hermana. Ha apartado al gusano del camino
para que no sea pisado; la ramita quebrada la enfajaba para que pudiera
50 Jordi Domènech-Casal, “Descifrando el código genético: reproducción de un descubrimiento
científico”, Science in School (25.10.2016), https://www.scienceinschool.org/es/article/2016/
cracking-genetic-code-replicating-scientific-discovery-es/.
51 El código genético es el conjunto de reglas que define cómo se traduce una secuencia de
nucleótidos en el ARN a una secuencia de aminoácidos en una proteína. Este código es
universal y se encuentra conservado en todos los organismos vivos, es decir que todos
los organismos vivos conocidos utilizan el mismo código genético. Esto demuestra que
todos los organismos comparten una historia evolutiva común. Y es Darwin quien propuso
que las especies cambian con el tiempo, que las especies nuevas provienen de especies
preexistentes y que todas (absolutamente todas) las especies comparten un ancestro común.
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A nueve años de la Encíclica Laudato si'120
sobrevivir; cultivaba un gran cariño para con toda la creación. Es
precisamente esa actitud la que tenemos que tener y cultivar, exactamente
como lo hacía San Francisco.
A propósito, el Papa cita un texto bellísimo de San Francisco, en
el que dice a los frailes que, en los huertos, debían reservar un espacio
específico para las hierbas silvestres, porque ellas, a su manera, también
alaban a Dios. Y el Papa lo testimonia explícitamente en la encíclica.
“Por eso, él (San Francisco) pedía que en el convento siempre se dejara
una parte del huerto sin cultivar, para que crecieran las hierbas silvestres,
de manera que quienes las admiraran pudieran elevar su pensamiento a
Dios, autor de tanta belleza” (LS 12).
Todo esto para decir que la encíclica entraña, efectivamente, una
ecología integral y que por tanto nos involucra a todos. Y mucho más
aún con esa espiritualidad de la fraternidad verdadera, con todos los
seres vivos, ya que abrazando al mundo estamos abrazando a Dios, que
está escondido, mejor dicho, contenido/entrañado detrás de cada una de
esas realidades.
El Papa anima a las personas, describe la gravedad de la situación,
siempre con espíritu de esperanza, de animación, porque dice que
tenemos inteligencia y tenemos ciencia, que podemos y debemos (con
un profundo sentido ético) utilizarla bien y para salvar la vida de la
Tierra. Principalmente tenemos a Dios. Cita tres veces el texto del libro
de la Sabiduría (Sab 11:24), en el sentido de que Dios es el apasionado
amante de la vida: “Señor, que amas la vida”. Ese Dios no va a permitir
que la vida pueda desaparecer tan miserablemente por la falta de cuidado
e irresponsabilidad –cuando no imbecilidad– de los seres humanos; eso
la fe cristiana tiene que decirlo fuerte y claro.
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José Luis Saavedra 121
El Papa Francisco termina la encíclica invitando a que sigamos
cantando, y que los problemas y dificultades con nuestro planeta no
nos quiten la alegría de la esperanza. Francisco ciertamente suscita y
promueve esperanza, nos anima y nos dice que podemos y debemos
salvar la Casa Común. Es nuestra misión sagrada y debemos empezar
ya, ahora, en el sentido que cada uno tiene que hacer su revolución
molecular52, empezar por sí mismo la gran transformación, no esperar
que venga de afuera o creyendo en la misión mesiánica de la ciencia.
No perdamos de vista que el tipo de ciencia que tenemos hoy no es para
salvar, sino es para acumular capital y destruir la naturaleza.
En general, el Papa nos insta a que podamos y debamos darle otro
sentido a la ciencia desde una perspectiva ética, de una perspectiva
ecológica integral y de fondo, es decir de manera radical, entendiendo a
la ecología no como una técnica de manejar recursos escasos, sino más
bien concibiéndola como una nueva visión, nueva sensibilidad, nueva
relación con la realidad, con la naturaleza, con la Madre Tierra.
El Papa Francisco nos insta a ecologizar los saberes, lo cual significa
que cada saber, la física, la matemática, la pedagogía, la religión, cada
saber tiene que dar su aporte para salvar el planeta Tierra y salvar la
vida, no solamente salvar sino también permitir que se desarrolle. Y
también se trata de que nuestros hijos, nietos y bisnietos puedan heredar
una Tierra habitable, porque tememos que ellos pueden, al mirar al
pasado y a mirar su situación, llegar a maldecirnos y decirnos, “vean qué
aguas tenemos que beber, vean qué suelos tenemos que pisar, qué aire
contaminado tenemos que respirar, qué comidas intoxicadas tenemos
que comer. Ustedes no han hecho la tarea de casa”.
La Encíclica del Papa Francisco es así un proyecto de vida más
sencillo. Por ello mismo, entraña una relación amigable, devota y leal
52 Félix Guattari, La revolución molecular (Madrid: Errata naturae, 2017), 19-124.
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A nueve años de la Encíclica Laudato si'122
con la naturaleza, y nos convoca a cultivar relaciones de amor y armonía
con la Madre Tierra. Es el proyecto que el Papa Francisco propone, y
creemos que tiene futuro y hay que seguirlo, porque corresponde al
sentido del universo y también al designio de nuestro Creador.
A modo de conclusión
Con la encíclica Laudato Si’ el Papa Francisco se coloca, como lo han
reconocido notables y connotados filósofos, pensadores, intelectuales y
científicos, a la vanguardia de la discusión ética, política y ecológica
prácticamente mundial. Así, aun cuando en muchas entrevistas el Papa
se ha referido a los gravísimos peligros que corre nuestra descuidada y
desastrada Casa Común, su mensaje es siempre de esperanza y nos invita
fraternalmente: “Caminemos cantando y que nuestras luchas y nuestra
preocupación por este planeta no nos quiten el gozo de la esperanza”
(LS 244).
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José Luis Saavedra 123
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mundo-mejor/.
Artículo presentado en 13.03.2024 y aprobado en 14.05.2024.
José Luis Saavedra es doctor en Estudios Culturales Latinoamericanos
por la Universidad Andina “Simón Bolívar”, sede Ecuador. Ha sido
Rector de la Universidad Aymara “Tupak Katari”, La Paz. Consultor
del IESALC/UNESCO. Ha sido Viceministro de Educación Superior,
Ciencia y Tecnología del Estado Plurinacional de Bolivia. Profesor en
varias Universidades públicas y privadas del Sur Andino: Bolivia, Chile
y Perú. E-mail: joseluisaavedra86@gmail.com; ORCID: https://orcid.
org/0009-0004-3901-3906.